Javier Mercado, de 16 años, estaba solo en su casa, en Washington (Estados Unidos) cuando oyó cómo su perro, Rex, comenzaba a ladrar como loco, según informa El Espectador.
Rex, un pastor alemán de dos años, había notado que unos desconocidos habían entrado en la casa. Javier llamó entonces a la policía y se escondió en el armario de su habitación, en la segunda planta.
Rex, en cambio, decidió enfrentarse a los asaltantes.
Rex bajó al primer piso y atacó a los ladrones y mordió a uno de ellos. Los ladrones se defendieron con violencia y golpearon al perro hasta hacerle sangrar. Malherido, Rex subió a la segunda planta, para evitar que los asaltantes hicieran daño a su dueño.
Y los ladrones aprovecharon entonces para disparar a Rex, tres veces, una en el cuello y dos en las patas.
Javier Mercado contó a CBS: «Mi perro lloró después de cada disparo. Si Rex no hubiera estado allí, habrían abierto esa puerta y me habrían encontrado», relató Mercado a CBS News.
En ese momento, las sirenas de la policía pusieron en alerta a los ladrones, quienes huyeron rápidamente.
Rex fue llevado rápidamente al hospital veterinario, estaba muy grave y la familia Mercado pensó que no iba a sobrevivir. Y Javier, entristecido, solo tiene palabras de agradecimiento para su querido Rex:
«Solo quiero agradecer a mi perro. Si no fuera por él, siento que no estaría aquí en este momento», dijo Mercado a Q13 FOX, según recoge El Espectador.
«Rex. Él es un ángel. Él es mi ángel de cuatro patas que teníamos en nuestra casa», aseguró Julia, la madre de Javier, a CBS News.
Han sido muchas las personas que, conmovidas por su historia, ha hecho donaciones, gracias a las que Rex ha podido ser operado. Ahora Rex se recupera de las heridas.
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