Dicen que los elefantes tiene mucha memoria, y yo añadiría que también un enorme corazón. La historia de la elefanta Yatta viene a confirmarlo.
Yatta es una elefanta a la que salvaron la vida hace 18 años los miembros de la organización David Sheldrick Wildlife Trust (DSWT), en Kenia.
Desde que tenía un mes fue cuidada en el santuario de la organización, donde se creció con la compañía de otros elefantes huérfanos.
Hace 8 años fue devuelta a la naturaleza para que se integrase con la manada en la selva.
Sin embargo, Yatta nunca se olvidó de sus cuidadores. Cuando Yatta fue mamá, tuvo claro que sus cuidadores tenían que conocer a sus pequeños.
Yatta llegó al santuario cuando solo era un bebé elefante y en él pasó 10 años. Cuando estuvo lista, la devolvieran a la naturaleza para que pudiera unirse a la mandada y vivir como deben vivir todos los elefantes, libres en la jungla.
Pero Yatta no olvida a quienes un día la cuidaron y ahora que se ha convertido en madre, ha querido traer a sus cuidadores lo más valiosos que tiene en la vida, sus hijos, Yetu y Yoyo.
Yatta ha vuelto al santurio para que todos conozcan a sus pequeños y el hermoso instante ha sido grabado y compartido para que todos podamos disfrutarlo. Abajo pueden ver las hermosas imágenes:
Se me llena el corazón cuando que veo que hay tantas personas que se preocupan por los animales y trabajan por su bienestar. Y está claro que los animales aprecian el esfuerzo y nos lo agradecen. ¡Comparte esas bonitas imágenes!
